domingo, 30 de enero de 2011

Que parezca un relato

El fantasma de la galería… aun me acecha. Con su mirada punzante, su aparente decrepitud y sus gruesos dedos, éste me persigue lentamente. En las calles, está disfrazado de otras personas para reconocerlo sutilmente, y en cada rincón de la ciudad logra asustarme todos los días un poco. Su presencia enmascarada aun está en mi inconsciente, en mis ocasionales sueños; a su vez, se encuentra en el despertar de mi conciencia cuando quiere ser recordado.
Es El fantasma de la galería que se halla expectante para que aprenda, de manera correcta, la difícil lección. A cada momento, aparece de imprevisto, aun si saber que su ocaso podría llegar pronto… Tanto él como yo sabemos que cuando desvanezca su espectro será porque la victoria ha llegado al alma correspondiente para quedarse y no dudar de su existencia. No será necesaria su constante vigilancia, porque ya será concebido el significado.
Es El insaciable fantasma de la galería que asusta con leves soplidos, pero por una razón. Él sabe por qué lo hace, y no se irá hasta no sentirse seguro de haber logrado su primordial objetivo.

sábado, 29 de enero de 2011

T.B.D.: The Blog dilemma

Encontré la siguiente imagen y me pareció muy realista: los “no beneficios” de escribir en un blog. Cuando uno explaya sus pensamientos en este medio, puede pensar que lo que está aportando al lector es algo importante, interesante, que puede ser muy leído y le daría cierta “ganancia”, o todo lo contrario, y suele pasar que uno se lleva varias sorpresas con determinadas notas… Nunca se sabe. Probablemente, a largo plazo -y según la suerte que acompañe a cada uno- esta armoniosa insistencia que es escribir aquí dé sus frutos, como ha sucedido en muchos casos.

Remeras que estarían buenas tener

Hay camisetas con inscripciones que están muy buenas para vestir, pero hay varias dificultades para conseguirlas: o no se hacen en todos lados, o son difíciles de conseguir, o sólo son para hombres, o lo que fucking sea…
Hay irónicas, hay realistas, algunas más divertidas que otras. Hay para todos los gustos!
Si conoces alguna que te gusta y tenes el link para verla, no dudes en comentarlo.
Me gustan algunas otras, pero no es “conveniente” ponerlas aquí…









El verdadero helado

Quien haya la leído la nota sobre la ciudad de Rosario que se publicó a principios del nacimiento de este Blog, quizás recuerde leer la parte donde no memoricé bien el nombre de la heladería que hago mención. Como siempre digo, las cosas suceden CUANDO tienen que suceder, por ejemplo, mudarse en determinados momentos y lugares.
Relato lo siguiente: la primera mañana que iba a trabajar mis ojos no pudieron creer cuando vieron la famosa heladería sobre la calle Quintana. ¡Sólo tiene una sucursal en la ciudad rosarina y ahora acá, que abrió hace apenas unos meses!

La heladería -proveniente de Italia- se llama ARKAKAÓ y los helados son completamente naturales, sin conservantes, ni líquidos extraños, ni saborizantes artificiales. Varios productos son traídos de Europa, por eso el precio… Pinta de heladería no tiene, porque está ambientada como salón de té, café y chocolatería, pero vale la pena un heladito requete rico de vez en cuando.
Aviso: después de probar esos gustos, no querrás ir a ninguna otra heladería, y creerás que por mucho tiempo te contaminaste el cuerpo con anda a saber qué. 

domingo, 23 de enero de 2011

Visión natural

Cielo gris = Lluvia
Árboles grandes =  Peligro
Aire fresco = Tampoco polar
Caída de granizo = Aviso por las dudas
Gatos = Alergia
Contrafrente de edificio = Chusmerío
Arco iris = Colorido

Pronostico extendido
El mes de enero se presenta nublado, con poco calor y ventoso por las noches, a veces con mucho trueno y bastantes mosquitos por estos lados.
Precaución: tenga cuidado de que no lo pille la lluvia desprevenidamente, sin paraguas y un techo cerca. Si sale con tal artilugio, ya sabrá usted que el sol saldrá (aunque no lo veamos).
Precaución 2: lleve encima un repelente, no sea cosa que lo pique el dengue que tuvo bastante propaganda el año pasado, sin embargo, este año no, porque debe cuidarse más de no chocarse con las bicisendas cuando dobla por una ochava.

sábado, 22 de enero de 2011

¿Por qué escribo?

En el último número de la revista ADN Cultura del diario La Nación que sale los días viernes hay una nota basada en la siguiente pregunta: ¿Por qué escribimos?
50 literatos dieron sus diferentes y muy variadas opiniones, mientras que yo también quisiera dar la mía.

La historia es así…

Me convertí en “blogger” (puesto que aun no hay medios que me brinden siquiera una columnita) para poder expresar a través de la escritura todo lo que siento, todo aquello que me gusta, también todo lo que me molesta y todo lo que pasa a mi alrededor. Escribo, principalmente, por una necesidad imperiosa de descargarme. Me siento feliz sintiéndome poseída en ese instante donde estoy sentada frente a la computadora pasando los “bocetos” hechos en un cuaderno de acotaciones que van surgiendo de la nada. Escribo porque me gusta el feedback, el “qué ocurrirá a continuación” (como se puede leer en la nota), es decir, las respuestas de “mis lectores” dando sus distintas perspectivas sobre los temas en cuestión. Escribo por placer y por necesidad de autorrealización, no por necesidad monetaria, porque aun no me pagan, aunque lo seguiría haciendo con gusto también. Me sucede exactamente lo mismo que el escritor que comentó: “Escribo porque mi cerebro se comunica mejor con mis manos que con la lengua”.

Varios autores coinciden en algo particular:
“Escribo porque no sé hacer otra cosa”.
“No sé hacer otra cosa, no sabría vivir de otra manera”.
“Escribo para disimular la incapacidad de hacer cualquier cosa”.
“No hay muchas cosas que sepa hacer”.

Podemos vislumbrar y decir que la escritura ha salvado a más de uno…

En la nota aclaran que la pregunta ¿Por qué se escribe? es incómoda. No veo tal inconveniente, al contrario, es una excusa más para escribir. Es como preguntar, ¿por qué se pinta?

Recomendación
- Si tenes cosas para decir y no sabes cómo hacerlo, escribí.
- ¿Queres escribir algo, lo que sea? Sentáte a escribir.
- ¿Hace mucho que no escribís? Empezá de una vez.
- Escribí hasta el cansancio.
- Escribí hasta que se te agoten las ideas.
- Escribí hasta que no tengas más tinta en la lapicera.
- Escribí porque sí.
- Escribí en cualquier momento, donde quieras y como quieras, en y con el soporte que más te guste: lapicera, lápiz o pluma, en una maquina de escribir, en una hoja de cuaderno, en servilletas, en papel higiénico, rollos de cocina, en la PC, hasta en la pared si te da la gana.
No quiero sonar evangelista ni nada por el estilo recomendando a la gente que vaya a escribir, sólo que es un acto pacifico y liberador que quizás a más de uno le venga bien y descubra, tal vez, ciertas cosas escondidas en su interior.

¡Buena suerte y buena escritura!

viernes, 21 de enero de 2011

4º Ley de Murprhy

Se te romperá un sólo auricular… Y no comprarás unos nuevos hasta que el otro no deje de funcionar también (a no ser que te acuerdes).

¡¡¡Por qué no se rompen los dos a la vez!!! Qué bronca…

miércoles, 19 de enero de 2011

Reapertura del M.A.M.B.A. ¡Al fin!


Después de mucho tiempo de espera, como toda capital turística y artística del mundo, posee nuevamente su museo de arte moderno. Al fin podremos ver las obras de los artistas argentinos que han desarrollado a lo largo del siglo XX manifestaciones de vanguardia en un lugar específico, en el espacio que se merecen ideado para sus creaciones (gusten o no).

El exterior es adecuado, porque era una fábrica y queda justo para representar el arte que poseería. El interior del lugar es asombroso, blanco y enorme. Clima artificialmente frío, espacioso y agradable para el transito del espectador. La escalera escultórica para subir al primer piso causa un poco de miedo, pero es fantástica.

Deseamos que esta institución forme parte del circuito obligatorio de visitas a los mejores museos que posee la ciudad. Dependerá mucho de las muestras en sí y la difusión de éstas por parte de los responsables, el gobierno y los medios.

Obra de teatro: TOC TOC (Trastorno Obsesivo Compulsivo)

El dramaturgo francés Lauren Baffiet escribió esta historia basada en seis estrambóticos personajes que se encuentran en un consultorio para ver al psiquiatra para que los trate por sus problemas. Como el médico no aparece, la terapia la realizan ellos mismos sacando unas insólitas conclusiones.

Para aquellos que aun no se enteraron, T.O.C. son las siglas de TRANSTORNO OBSESIVO COMPULSIVO. A las personas les afecta de diferentes modos: hay “grados” de T.O.C. más tranquilos y llevaderos que otros, los cuales pueden pasar desapercibidos, y hay otros que son realmente insoportables e inmanejables. Muchas veces padecer un T.O.C. puede ser más problemático de lo que parece. Pero yo me pregunto, ¿podemos decir que si una persona no tiene aunque sea un TOC, es normal?

La obra trata con mucho humor un tema muy delicado, sin caer en la burla. El guión y los protagonistas hacen que las escenas y los diálogos sean sutiles sin hacer sentir mal a los ajenos que se puedan llegar a sentir identificados. Bien tratado y con respeto, pasamos un buen momento teatral.

No caigamos en el cliché de que la obra es “imperdible”. Tampoco es una superproducción, pero vale la pena asistir para conocer a las distintas personas que podemos llegar a encontrarnos a lo largo de vida. La obsesión compulsiva es un acto repetitivo y cotidiano que no se puede controlar si no se trata. Probablemente, haya gente que no está enterada si padece un T.O.C. y no entienda qué significa ser un “obsesivo” con ciertos detalles.

Algunos “estereotipos” más comunes son: aquel que da vueltas antes de entrar a su casa; aquel que no pisa determinadas baldosas; el que tiene que fijarse si cerró bien la llave de gas, la puerta de la heladera o de su casa, o la canilla del agua; aquellos que revisan mil veces la cartera o bolso para asegurarse de que tiene las cosas que necesita tener, por ejemplo, las llaves, celular, papeles; el que repite palabras sin darse cuenta; aquel que tiene que tener todo ordenado de determinada manera; o el que cuenta todo lo que se le cruza por el camino, teniendo así una obsesión con el tiempo y los números. Bueno, así y más, hay un montón.

Tenemos un ejemplo cinematográfico: Mejor imposible, con Jack Nicholson. Varias cosas para ejemplificar: tiene que ir a comer a determinado restaurante, que lo atienda una camarera específica y llevarse sus cubiertos; también, tiene dificultades con la acera de New York. Es ordenado y no toca las manijas de las puertas de taxis y edificios.

Con humor e inteligencia, entenderemos lo que vemos y podremos hacer que la obra sea llevadera. Tampoco exagerar de risa, como hace el público argento.

Que tire la piedra y esconda su T.O.C. aquel que no lo quiere reconocer.

martes, 18 de enero de 2011

Volver al pasado

Se reestrenó Volver al futuro -versión digital y en 2D, digo esto porque muchos preguntaron si también era en 3D, y creo que si no se hace desde el principio, eso no se puede modificar- gracias a un cinéfilo que no quería que Argentina se quedara detrás de México y EE.UU. que decidieron pasarla en el cine en conmemoración a sus 25 años.
Es paradójico lo que sucedió con esta película: cuando se supone que la gente “no va al cine”, prefiere ser pirata y “bajar películas”, o algunos pocos que nos acordamos de “alquilar películas”… ¡Se llenó! Sí, gran éxito de reestreno en horarios absurdos para ver un clásico ochentoso.

¡Los nostálgicos de fiesta!

Está buenísimo el suceso -que para muchos colgados o desinteresados del tema pasó desapercibido-, y qué increíble lo que puede el fanatismo. En la semana de estreno, la película se impuso como si fuese una película nunca antes vista.

Felices y contentos habrán vuelto a sus casas los seguidores de esta trilogía, que si son buenos con la legalidad, comprarán los dvd correspondientes.

viernes, 14 de enero de 2011

Comentario al paso

Tirando cosas para evitarlas en la mudanza encontré la siguiente frase en un cuaderno, que creo que sé quien me la mencionó, hace ya varios años.

No sos la típica rubia tonta, sos la atípica rubia lista.

3º Ley de Murphy

Ley de Murphy (conocida)

"Si estás esperando el bus, pasarán todos aquellos que están en la misma calle -MÁS DE UNA VEZ- menos el tuyo".

Ley de Murphy bis

"Pasarán dos o tres colectivos juntos y te tomarás el primer coche… El más lleno de gente". (Luego veras pasar a los otros con asientos libres, claramente)

Ley de Murphy bis 2

"El bus que vos tomas, por supuesto, no tiene aire acondicionado". (Aunque vale aclarar que de las 200 líneas que hay en Capital, menos de 10 brindan aire fresco, encima se pagaría más el boleto, debido al costo que estos conllevan. Pero, aun así).

viernes, 7 de enero de 2011

Lo pedís, lo tenes…

“Desearás un changuito para la mudanza, y lo obtendrás”.

De este modo, te librarás cómoda e inmediatamente, de los libros que más peso tienen. (Eso sí, el chango baja por el ascensor principal, puesto que tiene coronita).

Premisa 1: Tengo un montón de ADN y Ñ para reciclar/vender.
Premisa 2: Tengo un carrito de supermercado.
Conclusión: No se trata de ser cartonero, ni generar competencia.


Seremos… Homo Encorvus

Seguramente, ésta sea la próxima denominación basada en la evolución humana. Se debe al surgimiento progresivo de los trabajos modernos que poseen máquinas que nos esclavizan a permanecer sentados a una silla la mitad del día -a veces más incómoda que cómoda- y que nos llevarán de nuevo a la posición primitiva, definitivamente.
Es el precio del progreso y será el costo de nuestras billeteras, porque nuestras espaldas piden a gritos un masajista. Probablemente, nuestras vértebras se gastarán más de lo planeado por la sabia naturaleza (o quizás no).
Los aparatos nos dominan, estamos alienados a ellos y al sistema devorador de masas (no estoy haciendo alusión al marxismo). La idea del ficticio Terminator será una realidad, y los humanos tendremos que armar la resistencia contra la supremacía de los artefactos que querrán controlarnos para siempre y en cada momento.
Tal vez no sea erróneo pensar que los próximos monos formarán parte del grupo de los invertebrados.

¡Buena suerte, Homo Encorvus!


lunes, 3 de enero de 2011

Una buena y una mala

Hay dos cosas que quiero resaltar que nada tiene que ver con el criterio que se viene utilizando en este blog (me refiero a ciertas “notas de opinión”), pero como estos días se vienen un tanto revoltosos y, además, notarán, ando un poco falta de ideas, pasaré a contar lacónicamente lo siguiente.

La muy buena noticia es que después de mucho tiempo de búsqueda y expectativa he conseguido trabajo en un buen lugar, el ambiente serio que uno se merece para estar la mayor parte de su tiempo. Esperemos que la espera valga la pena.
 La patética novedad es que a lo largo de la semana estaremos embalando cosas para la nueva mudanza, sí, otra más para nuestra colección. Quien se ha mudado varias veces sabe el peso físico, mental y sentimental que eso conlleva, más cuando ciertas cosas no acompañan, por ejemplo, vivir en un país donde la gente le gusta más ser vaga que trabajar.
¡No more comments!
Como no se puede tener un disfrute completo, porque vivimos en un constante ying y yang, se tratará de hacer ameno el tiempo, lo más que se pueda, y de rezongar lo menos indispensable, para que todos tengamos, en lo posible, momentos de agrado y no llenarnos de malas energías, total todo pasa…

¡Hasta los próximos acontecimientos!