Revolvía mi café con leche
luego de ponerle azúcar y la sensación entre mis dedos era distinta. Miré
atentamente y comparé exclamando “sabía
que esta cuchara no pertenecía a este sitio”. Pero qué sorpresa. Una cucharita
pequeñita que no sabes de donde salió, nadie la trajo, nadie la reconoce, nadie
la quiere, pero qué más da. ¿Recuerdas aquella vez que desapareció un cuchillo
y un tenedor? Lo recuerdo perfectamente, lo que no recuerdo fue precisamente el
momento en que seguramente los tiré a la basura, luego de cenar, junto con las
sobras. ¿A dónde habrán ido a parar? Pero es más probable que los utensilios de
cocina desaparezcan, no que aparezcan de la nada como la extraña cucharilla.
Quizás Dora la exploradora tiene una mejor explicación.
Las desapariciones de cucharillas, tenedores, cuchillos son proporcionales al misterio de los calcetines en la lavadora.... por que siempre hay calcetines huerfanos a la vez que otros tantos desaparecidos? Un misterio digno de ser contado. Y resulto.
ResponderEliminarigual las cucharas..cuhillos..tenedores...cucharillas, que un día de pronto ya no están,se hayan ido despacito y ahora estén o sean CUBIERTOS DE GLORIA
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